Uno de los discos más destacados de 2010, publicado por el sello lituano No Bussiness en una edición en vinilo limitada a 300 copias, es Woodblock Prints, firmado por el baterista y compositor canadiense Harris Eisenstadt.
El nombre del álbum es una refierencia al ukiyo-e ("pinturas del mundo flotante"), un género de grabados realizados mediante xilografía, y producidos en Japón entre los siglos XVII y XX.
Era una forma de arte popular cuyo tema original fue la vida de la ciudad, en particular actividades y escenas de lugares de esparcimiento.
Eisenstadt dedica composiciones a sus destacados cultores: Katsushika Hokusai, Utagawa Hiroshige y Hasui Kawase.
La música interpretada por un noneto que incluye un sexteto de vientos (clarinete, saxo alto, fagot, trombón, tuba y corno francés), guitarra, contrabajo y batería; recorre paisajes cautivantes, intensos, sin abandonar aires camarísticos (The Floating World, Hokusai).
El nombre del álbum es una refierencia al ukiyo-e ("pinturas del mundo flotante"), un género de grabados realizados mediante xilografía, y producidos en Japón entre los siglos XVII y XX.
Era una forma de arte popular cuyo tema original fue la vida de la ciudad, en particular actividades y escenas de lugares de esparcimiento.
Eisenstadt dedica composiciones a sus destacados cultores: Katsushika Hokusai, Utagawa Hiroshige y Hasui Kawase.
La música interpretada por un noneto que incluye un sexteto de vientos (clarinete, saxo alto, fagot, trombón, tuba y corno francés), guitarra, contrabajo y batería; recorre paisajes cautivantes, intensos, sin abandonar aires camarísticos (The Floating World, Hokusai).