lunes, 12 de abril de 2021

Adiós (2019), de Paco Cabezas


No es la España que estás acostumbrado a ver en los videos, o la España de las anticuadas postales.
No es la Sevilla de la Giralda, el Alcázar o las Setas.
Es un escenario inhóspito, poco acogedor, habitado por seres que tienen que luchar para sobrevivir.
Hombres y mujeres a merced de un micro mundo hostil que no perdona a los que no son lo suficientemente fuertes.
Un ambiente que se torna enrarecido, irrespirable, a cada paso agitado de sus moradores en la búsqueda de un escape que se presenta ilusorio, de la posibilidad de una huida que parece desvanecerse a cada instante eterno.
Es el Tercer Mundo en el Primer Mundo.

Los tipos en Sevilla son duros, como en todas partes.
Arreglan sus chanchullos, dirimen sus disputas, resuelven sus pleitos a los tiros.
El veterano policía Manuel Santacana (Carlos Bardem) y el condenado por tráfico de drogas Juan Santos (Mario Casas) son fuertes por necesidad, tienen la piel curtida de tanto yugarla.
No habrían sobrevivido en ese medio de no ser así.
A su pesar, no pueden evitar acabar víctimas de sus propias debilidades.
Eli (Ruth Díaz), colega de Santacana; Triana (Natalia de Molina) y María Santos (una intimidante, de permanente ceño fruncido, Mona Martínez), mujer y madre de Manuel, respectivamente; por su condición de mujer son llamadas a ser vulnerables, y las que pagan los platos rotos de las decisiones que toman los tipos.
Pero resisten, hasta el final, mostrando una entereza y una integridad que no parecen tener los hombres.
¿Y los niños? En medio del fuego cruzado. ¿Como en la vida misma, no?

Juan es beneficiado por una libertad transitoria para asistir a la comunión de su pequeña hija Estrella (Paulina Fenoy).
En el camino de regreso a casa después de la celebración, el auto en el que se traslada junto a Triana y Estrella es embestido por otro coche y la niña muere en el accidente.
Santacana y Eli están a cargo de la investigación del probable homicidio de cuatro traficantes rumanos. Llegados a la escena del crimen se les informa que, convenientemente, no hay testigos entre los vecinos.
Es el barrio de Las 3.000 (viviendas) y cada quién está por sí mismo.
Un territorio disputado por las familias Fortuna y Taboa, campo de batalla donde se discute el liderazgo en la comercialización de estupefacientes en el vecindario.
Durante el curso de las averiguaciones, Santacana y Eli se enteran que el auto de los rumanos distribuidores de drogas chocó a otro donde falleció una chiquilla, perteneciente al clan Fortuna.
Sin tiempo que perder, deberán hallar al culpable, antes que la sed de venganza desate la violencia, cobrando más víctimas y extendiendo la tragedia.

García Lorca envasado en un thriller, puede que Adiós no sea todo lo narrativamente acabada que fuese deseable, y que visualmente carezca de verdaderos aciertos; pero son detalles mínimos, porque sus imágenes tienen nervio, contundencia.
Apoyado en las muy buenas actuaciones, incluyendo los roles secundarios, por ejemplo: Maravilla (Pilar Gómez) o Kempes (Salva Reina); Paco Cabezas tiene la intención de exponer a sus personajes violentos, a la vez víctimas y victimarios, y lo hace bien.

Ahora ya saben quiénes arreglan las cosas que están torcidas en Sevilla, poniendo el cuerpo.
Las mujeres, como en todas partes.

"A ver quién es el valiente que pasa primero.
¡Qué pasa! ¿Dónde están los cojones ahora?
Pistolita me vai a venir a mí.
Me las paso por el coño, ¿Me oyen?
Ustedes no saben de lo que es capaz una madre".

1 comentario:

soyo dijo...

Me quedo contigo
Enrique Salazar Salazar/Crescencio Ramos Prada

Si me das a elegir
Entre tú y la riqueza
Con esa grandeza
Que lleva consigo,
¡Ay, amor! Me quedo contigo

Si me das a elegir
Entre tú y la gloria
Pa que hable la historia de mí
Por los siglos,
¡Ay, amor! Me quedo contigo

Pues me enamorao
Te quiero y te quiero
Y sólo deseo
Y estar a tu lado
Soñar con tus ojos
Besarte los labios
Sentirme en mis brazos
Que soy muy feliz.

Si me das a elegir
Entre tú y ese cielo
Donde libre es el vuelo
Para ir a otros nidos,
¡Ay, amor! Me quedo contigo

Si me das a elegir
Entre tú y mis ideas
Que yo sin ellas
Soy un ser perdido,
¡Ay, amor! Me quedo contigo

Pues me enamorao
Y te quiero y te quiero
Y sólo deseo
De estar a tu lado
Soñar con tus ojos
Besarte los labios
Sentirme en mis brazos
Que soy muy feliz

Rocío Márquez - voz
Fernando Vacas - piano, órgano Hammond, arreglos de cuerdas, efectos de sonido, productor

Versión original: Los chunguitos
Deprisa, deprisa (Carlos Saura, 1981)